En un discurso en en Río de Janeiro, el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva defendió la inocencia de Dilma Rousseff acusada de violar leyes presupuestarias y abonó la teoría de un golpe blando opositor. 

 "Lo que están haciendo es descubrir una forma de llegar al poder sin tener que disputar el voto popular (...) Está comenzando una semana de la vergüenza nacional, con el juicio político a Dilma en el Senado", sentenció Lula y agregó: "No están suspendiendo a Dilma, sino al voto que ustedes le dieron en el 2014 (...) Como brasileño estoy avergonzado de ver que nuestro Senado esté discutiendo la condena de una persona inocente", agregó.

Sobre su situación ante la justicia señaló: "Estoy siendo investigado hace dos años. No tengo problema. Pueden investigar más de dos años, pero no perjudiquen a los trabajadores brasileños (...) Si alguien cree que me va a asustar haciendo amenazas, está engañado".


Además planteó que  "Dilma cometió el crimen de ser honesta. Obviamente, pudo haber cometido errores, ¿pero quién no comete errores? ¿Quién? ¡Obama y todos ellos!" y cuando fue consultado si sería candidato en el 2018 por Partido de los Trabajadores  respondió: "Vamos a ver".