Anna Hankins, una adolescente de Mississippi se presentó en la competencia de su ciudad natal, Miss Amazing, un concurso para niñas y mujeres con discapacidades y lo ganó por su fuerza a salir adelante y no caer a pesar de sufrir el trastorno genético llamado síndrome de Prader-Willi, cuyo trastorno hace que tenga hambre todo el tiempo. 

La afección, que afecta solo a 1 de entre 10,000 a 30,000 personas, puede causar problemas con el desarrollo físico y mental, lo que lleva a un tono muscular deficiente, deterioro intelectual y apetito insaciable, según los Institutos de Salud. Pero en el concurso de Miss Amazing, la joven Hankins se presentó como una estudiante de secundaria que ama a su cachorro, el color rosa y cantar en la iglesia.

Un vídeo mostró su presencia en el concurso cantando Amazing Grace (My Chains Are Gone) de Chris Tomlin y fue coronada como reina del concurso y feliz posó para las fotos con una tiara y un vestido rosa brillante. 

Luego de haber sido coronada, Anna contó que lo que más le gusta "es cantar, el maquillaje y la peluquería" y sobre el síndrome de Prader-Willi dijo: "Tengo mucha hambre. A veces puede ser difícil de tratar".

Lori Brasfield, directora de Mississippi Miss Amazing, dijo de la adolescente que era "una inspiración".

"El síndrome de Prader-Willi es raro, pero Anna toma esas dificultades con calma", señaló Brasfield en un comunicado enviado a The Washington Post. "En Mississippi Miss Amazing, ella hace amigos fácilmente y le encanta que los peluqueros y los maquilladores la mimen. No tiene miedo de reunirse con los jueces para que la interroguen o subir al escenario para mostrar sus talentos". "Ella personifica el objetivo de Miss Amazing al compartir sus talentos y habilidades con su comunidad, así como en nuestros eventos estatales y nacionales".

Hankins ha tenido problemas con su peso desde que era niña. A los dos años fue diagnosticada con el síndrome de Prader-Willi. "Cuando era pequeña, las primeras palabras que salieron de su boca fueron 'Tengo hambre' y las últimas fueron 'Tengo hambre'", dijo su madre, Jennifer Hankins, al medio SWNS.

Explicó también que su hija llegó a sacar comida de los platos de la cena de sus padres, robó cosas del refrigerador o llegó a rebuscar entre la basura. "Nos levantábamos por la mañana, y nos dimos cuenta que en la mitad de la noche se había levantado para hacer un pastel", contó.

"Limpiamos su habitación y encontramos envoltorios de comida vacíos. No sabíamos cómo detener esa situación. Se hizo más y más grande", cuenta. Finalmente, Jennifer Hankins dijo que tuvo que cerrar el refrigerador pero su hija no puede evitarlo. "Está hambrienta todo el tiempo", cuenta. 

Cuando su hija está en público, la gente la mira boquiabierta, y los niños, a veces, dicen: "Dios mío, ella está muy gorda". "Ser parte de Miss Amazing definitivamente ayuda con su autoestima, y ver a otras niñas que tienen necesidades especiales la ayuda a saber que no es la única", comenta Hankins.

"A ella le encanta ponerse vestidos, subir al escenario y cantar. Le encanta ser el centro de atención", agrega. "Lloro todo el tiempo. Me pongo nerviosa y estoy ansiosa por ella, pero luego se levanta y brilla, y es ella misma. Es un momento en el que podemos olvidarnos de todos sus problemas", relata.

A lo largo de los años, dice Hankins, su hija compitió en el concurso y ha ganado el título estatal tres veces. SWNS informó que la adolescente irá a la competencia nacional en Chicago a finales de este año.

Fuente: Infobae