Lo que hasta ahora se conoce como Operación Lava Jato es una estrategia de la oposición para desgastar la figura de Luiz Inácio Lula da Silva y que éste no pueda suceder a Dilma Rousseff en el Poder Ejecutivo.  

Mientras en las calles se ve a la juventud con un claro apoyo hacia el exmandatario, desde los medios y grandes corporaciones se incita- a través de la repetición constante en las noticias-  a asociar a Lula con investigaciones por lavado y corrupción. En diálogo con Telesur, el periodista y sociólogo brasileño, Laurindo Leal planteó que la derecha de su país está jugando todas sus cartas para sacar del poder al Partido de los Trabajadores (PT). 

Incluso desde que salió a la luz pública el caso de corrupción en Petrobras, la oposición brasileña pretende vincular a la actual presidenta Dilma Rousseff y a los miembros del PT con ánimos de realizar un juicio político. Aunque hasta el momento la comisión parlamentaria brasileña, encargada de la investigación de corrupción en la petrolera estatal, eximió a ambos líderes de toda responsabilidad  por falta de pruebas en su contra.

Operação Lava Jato

La operación (en castellano Operación lava autos) recibió ese nombre debido al uso de una red de lavanderías y petroleras para lavar el dinero procedente de actividades delictivas que vendrían realizándose desde 1997. La oposición al PT intentó más de una vez involucrar a Rousseff y Da Silva en la investigación, hasta ahora sin éxito.