Por un lado, el presidente ruso Vladimir Putin admitió a través de funcionarios de su gobierno que, como se sabe, está recibiendo "muchas peticiones" de las regiones prorrusas y separatistas del este del país para que intervenga "de una u otra forma".

El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo que "llegan muchas peticiones de las regiones del este de Ucrania dirigidas personalmente a Putin, con la solicitud de que ayude de una u otra forma, de que intervenga de alguna forma".

"El presidente de Rusia observa la evolución de los acontecimientos en estas regiones con una gran preocupación", agregó Peskov, mientras su gobierno propone al de Kiev, encabezado por el presidente provisional Viktor Yanukovich, que apruebe una nueva Constitución que convierta al país en una federación, otorgue a la lengua rusa el estatus de oficial y reconozca a Crimea como parte del territorio ruso.

Pero, por otro lado, los Estados Unidos no se quedan impávidos ante la compleja situación que puede derivar en la balcanización de Ucrania. El gobierno de Barack Obama estudia "como una opción" en envío de armas al de Yanukovich para enfrentar una eventual rusificación de su territorio.

Así lo indicó Thomas Shannon, asesor del secretario de Estados John Kerry, quien señaló que "obviamente" EE.UU. está considerando "como una opción" la entrega de armas al gobierno provisional ucraniano.

Shannon coincidió con la posición de la embajadora estadounidense ante la ONU, Samantha Power, quien argumentó que lo que ocurre en el este ucraniano es una "invasión encubierta", cuyo patrón principal se estableció en Crimea.

De hecho, el Departamento de Estado envió el domingo un correo electrónico a los medios de comunicación titulado 'Ficción rusa. Segunda parte', formado por 10 puntos, en los que acusa a Moscú de mentir a la comunidad internacional y de estar llevando a cabo operaciones directas para ocupar el este de Ucrania, según reproducen los medios internacionales.

"El gobierno ucraniano ha arrestado en las últimas semanas a más de una docena de presuntos agentes de inteligencia rusa, muchos de ellos armados en el momento de su arresto", se asegura en el emailm al tiempo que habla de "los provocadores de Rusia" que están "fomentando el descontento" entre la población.

Por el momento, tanto EE.UU. como Rusia pueden hacer declaraciones y ciertos movimientos que no impliquen un riesgo mayor de agudizar el conflicto, pero los factores internos, la situación propia del país y de su población, es la que puede derivar a corto plazo en una posición de 'zugzwang', tan temida en el ajedrez.