La espera terminó. El príncipe Harry de Inglaterra y Meghan Markle contrajeron matrimonio este sábado, en una ceremonia celebrada en la capilla de St. George en el Castillo de Windsor, ciudad ubicada a 30 kilómetros del oeste de Londres.

Dada la ausencia de su padre, Meghan ingresó a la capilla acompañada por el Príncipe Carlos. Antes, la reina Isabel II nombró al príncipe Harry duque de Sussex, conde de Dumbarton y barón de Kilkeel. Meghan Markle recibirá sus títulos luego de la boda, convirtiéndose en la duquesa de Sussex.