Mientras el presidente ultraderechista Jaír Bolsonaro culpa a los ambientalistas de los incendios, lo cierto es que más de 20 mil hectáreas de selva desaparecen ante nuestros ojos.

Miles de usuarios muestran su indignación por lo sucedido y por la falta de reacción de los más poderosos para evitar que esto siga sucediendo