Cristiane Brasil fue nombrada ministra de Trabajo como la sustituta de Ronaldo Nogueira, quien renunció al cargo tras conocerse los primeros resultados negativos de la reforma laboral que impulsó. Él argumento, no obstante, que dimitía para concentrarse en la campaña en la que intentará ser reelegido diputado.

Esta abogada y diputada de 44 años iba a asumir el 8 de enero, pero el juez federal de Río de Janeiro Leonardo da Costa Couceiro impidió la asunción: había sido condenada por haber tenido trabajadores en negro a su cargo.

El Movimiento de los Abogados Laboristas Independientes (MITI) presentó una denuncia y consideró que, por el principio de la moralidad, una persona que fue condenada por infringir las leyes laborales brasileñas no puede asumir como ministra de Trabajo, argumento que fue acatado por la justicia en primera instancia.

El presidente Michel Temer reformuló la fecha de asunción, pero finalmente el Supremo Tribunal Federal de Brasil prohibió que Cristiane Brasil pueda asumir, lo que representa un duro revés para el gobierno de Temer.

Aunque difícilmente tenga repercusiones locales, lo cierto es que idénticos argumentos podrían aplicarse contra el ministro Jorge Triaca, quien insultó a una empleada que tiene en negro, según trascendió a través de un audio.

El jefe de Gabinete Marcos Peña ya dijo que las actitudes del ministro de Trabajo argentino son apenas “un error” y no constituyen "algo que tenga que costarle el cargo".