La situación en Bolivia está descontrolada. La derecha no mide sus acciones y las peores imágenes son captadas y vistas por el mundo.

En medio de la renuncia obligada de Evo Morales, un grupo de manifestantes enardecidos y fuera de control ocuparon las instalaciones de dos medios estatales bolivianos y obligaron a sus empleados a abandonarlas.

En ese marco, las imágenes muestran cómo, una turba enardecida agarró a José Aramayo, director de la radio de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia, y lo ataron a un árbol.

Situación similar vivió Víctor Borda, el presidente de la Cámara de Diputados de Bolivia.