En Polonia, donde se encuentra de gira, el papa Francisco estuvo este viernes en el campo de exterminio nazi de Auschwitz y saludó a diez sobrevivientes del Holocausto, luego de lo cual encendió una vela que dejó como regalo frente al denominado 'Muro de la Muerte' del campo en el que fueron asesinadas más de un millón de personas entre 1940 y 1945.

Tras atravesar el portón de ingreso a las 9.15 locales (4.15 de Argentina), Francisco se sentó en silencio y con los ojos cerrados durante más de diez minutos en uno de los bancos del campo de exterminio ubicado a 66 kilómetros de Cracovia, donde llegó el miércoles para una visita de cinco días a Polonia durante la que participa de la XXXI Jornada Mundial de la Juventud.

"Señor, ten piedad de tu pueblo. Señor, perdón por tanta crueldad", escribió el pontífice en el libro de visitas del campo de exterminio. Luego, rezó cinco minutos en soledad en la celda del santo polaco Maximiliano Kobe, asesinado en 1941 a los 47 años al ofrecerse a ser ejecutado en lugar de otro prisionero que tenía esposa e hijas.

El mensaje del papa Francisco en el libro de visitas de Auschwitz

Francisco en Auschwitz: "Perdón por tanta crueldad"