Pocas horas después del estallido y la conmoción que provocó una bomba casera en un subterráneo al sudoeste de Londres, dejando como saldo más de 20 heridos, pudo haber tenido una cifra de víctimas mucho mayor incluso, estadísticas mortales.

En medio locales, especialistas describieron los hechos en comparación con el atentado sucedido en 2005, cuando 52 personas perdieron la vida: esta vez la explosión se dio en plena hora pico, en la estación de Parsons Green de la línea District.

Según reprodujo La Nación, el profesor de ingeniería de seguridad en la Imperial College de Londres, Hans Michels, encuentró similitudes entre la bomba de fabricación casera que causo pánico esta mañana y aquellas de 2005.

"En apariencia, los restos del dispositivo parecen muy similares a los de los dispositivos basados en peróxido de hidrógeno usados en 200. El tamaño y el balde plástico donde se alojaba también es similar", dijo a The Telegraph.

Al ver el balde de pintura que contenía el artefacto intacto y los testimonios que hablan de una llamarada, son signos de una evidente falla: "O la mezcla no era la adecuada, o el sistema de detonación no lo era", especuló Michels.