En el medio del investigaciones federales por posibles hackeos, que salpican al círculo más cercano de Donald Trump, y con el debate sobre las libertades y privacidades online de inmigrantes que deseen entrar a Estados Unidos; el Congreso eliminó las garantías de privacidad en Internet.

La Cámara de Representantes ratificó este martes una ley impulsada por el Senado, que cuenta con el respaldo de la Casa Blanca, que habilita a los proveedores de conexión a la Red a comercializar los historiales de búsqueda de los usuarios. 

La ley, que se espera que sea firmada por Trump en los próximos días, tuvo  215 votos a favor de republicanos, y 205 en contra, de todos los representantes demócratas junto a 13 republicanos. Quienes se opusieron marcaron la arbitrariedad de la norma en términos de falta de información y testimonio de expertos; además de chocar con las nociones de libertad y privacidad. 

Las compañías de telecomunicaciones,  como Comcast o Verizon, serán las principales beneficiadas ya que tienen un nuevo producto para vender a otras empresas. En octubre de 2016 la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC)  exigía a los proveedores de conexión a Internet que  soliciten permiso de los usuarios para vender sus datos, desde el historial de búsqueda hasta las aplicaciones que descargan en sus dispositivos o si navegan por Internet desde un ordenador o una tablet. Pero ahora ese necesidad de solicitar un permiso será revocado por la nueva ley y los datos del usuario se podrán vender por defecto, salvo que el consumidor pida expresamente que no sea así.