Una discoteca de Mallorca, en las islas Baleares, fue sancionada con un año de cierre por la práctica de una "felación colectiva" cuya difusión en vídeo en las redes sociales escandalizó a toda España.

El propietario del local Playhouse, en la playa de Magaluf, recibió "una sanción de doce meses de cierre y multa de 55.000 euros", informó ayer el Ayuntamiento de Calvià, municipio mallorquín al que pertenece este gran centro turístico que atrae cada año a miles de jóvenes británicos, irlandeses y escandinavos.

La sanción se decidió "al haberse determinado, tras una pormenorizada investigación de la policía local de Calvià, que fue dentro de este local donde se practicó una felación colectiva grabada en un vídeo al que se dio difusión a principios de este mes de julio a través de las redes sociales", explicó el ayuntamiento en un comunicado.

"Tras aparecer en los medios de comunicación el citado vídeo, el alcalde, Manuel Onieva, además de mostrar su más absoluto rechazo a este tipo de prácticas, ya anunció una investigación en profundidad", recordó el ayuntamiento.

Estas imágenes habían provocado un escándalo en España.