"Pensábamos que estábamos actuando de forma perfectamente legal. Miles y hasta decenas de miles de 'apps' hacían lo mismo con los datos de Facebook, era algo totalmente normal en su momento", aseguró el psicólogo y profesor de la Universidad de Cambridge Aleksandr Kogan quien dice sentirse "usado como chivo expiatorio" por Facebook y la consultora Cambridge Analytica.

Este profesor de origen moldavo fue quien creó la aplicación que en 2014 robó los datos y perfiles personales de 50 millones de usuarios en Facebook y que fueron utilizados para diversas campañas sucias en numerosos países del mundo, como se conoció recientemente a partir de diversas investigaciones periodísticas. 

Mientras Zuckerberg elige, por el momento, mantener el silencio; en una entrevista concedida hoy a la emisora británica BBC Radio 4, Kogan explicó que él no hizo nada ilegal. "Es una mentira. Ellos [Facebook y Cambridge Analytica] me contactaron y ellos mismos escribieron los términos de uso de la aplicación. Incluso ofrecieron los servicios de asesoramiento asegurando que todo era legal y apropiado", planteó Kogan. 

Kogan programó la aplicación con un fin académico que terminó siendo comercializado y que ahora desató el escándalo y la crisis de Facebook. 

"Ellos decían que todo era perfectamente legal. Uno de mis grandes errores fue que simplemente no hice suficientes preguntas", explicó el profesor a la BBC. 

Este investigador desarrolló una aplicación llamada "This is Your Digital Life" (Esta es tu vida digital). Se trataba de una de las cientos de encuestas aparentemente inofensivas que circulan en Facebook y otras redes sociales, del tipo "¿Qué Pokemon eres tú?", o "¿Cuáles son las palabras que más usas?".

Los resultados básicos conseguidos por la encuesta se combinaban con datos arrancados de los perfiles y amistades de Facebook para conseguir una larga lista de rasgos de un usuario al que se le podía destinar luego un mensaje electoral más o menos a medida. 

Sobre la supuesta capacidad de influir en los votantes, Kogan aclaró: "La precisión de estos datos ha sido tremendamente exagerada. En la práctica, mi estimación es que teníamos seis veces más probabilidad de equivocarnos con todo respecto a un votante que de acertar. Personalmente creo que el 'microtargeting' no es una forma efectiva de usar este tipo de bases de datos".