"Es una instancia judicial en la que no me he involucrado (por las investigaciones en el caso Curuguaty que un saldo de 11 campesinos y seis policías muertos en un intento de desalojo de un terreno cerca de la frontera con Brasil, en 2012). No estuve en le gobierno que cayó, no estuve en el gobierno que asumió después del golpe", exclamó Cartes cuando llegó a Paraguay después de su viaje oficial a Israel. 

Inmediatamente las repercusiones políticas y mediáticas no se hicieron esperar ya que Cartes se refirió a la salida, en junio del 2012, de Fernando Lugo del Ejecutivo como "un golpe". Más tarde el  Presidente paraguayo se vio obligado a emitir un comunicado para retractarse: 

A todos los paraguayos:
 
En mis declaraciones de esta mañana, cometí un error al utilizar una palabra que tiene un sentido político totalmente diferente a mis convicciones. 
 
Como fue reconocido por autoridades y naciones de todo el mundo, el proceso de destitución a través del juicio político se enmarcó en la Constitución Nacional y en las leyes vigentes.
 
Pido disculpas a la Nación Paraguaya por la mala elección de palabras.

 

Horacio Manuel Cartes Jara

Presidente de la República del Paraguay

El mismo "desliz" lo tuvo el presidente interino de Brasil, Michel Temer que publicó un tuit en el que denunció a la suspendida Dilma Rousseff por usar “el avión presidencial para denunciar el golpe de estado” que prevalece en Brasil.