En un discurso televisado hacia el pueblo francés, el actual presidente François Hollande - que posee muy baja popularidad- anunció: "No he perdido la lucidez y he decidido no ser candidato a la elección presidencial".

Inmediatamente la sorpresa se apoderó de todos y se abrieron nuevas perspectivas políticas ante la carrera presidencial a disputarse en 2017 y cuyas internas ya empiezan a delinearse. Hasta el momento, el único candidato que presentó oficialmente su candidatura por la izquierda es el exministro de Economía Arnaud Montebourg, del ala radical del Partido Socialista.

El actual jefe del Estado francés hizo el anuncio  tres días después de un tenso almuerzo que mantuvo con su primer ministro, Manuel Valls al que deja como candidato posible. El nombre de Valls tuvo cierta resonancia internacional reciente cuando planteó que el burkini "no es compatible con los valores de Francia"

Entre Los Republicanos, el exprimer ministro François Fillon fue elegido el pasado domingo como candidato de la derecha con un amplio apoyo dejando afuera a Sarkozy.  

Fuente: El País