El presidente filipino, Rodrigo Duterte, fue repudiado por obligar a una mujer a darle un beso en la boca en público durante un encuentro con la comunidad filipina durante una visita oficial a Corea del Sur.

Durante un acto en Seúl, el mandatario de 73 años iba a emntregar un libro sobre la presunta corrupción en la Iglesia católica en Filipinas y dijo que una mujer tenía que buscarlo porque quería un beso a cambio.

"Hombres no, el precio de esto es un beso", señaló al mismo tiempo que le gritaba a una mujer en la multitud. "¿Estás dispuesta a darme un beso?".

Entonces subieron dos mujeres a la tribuna y Duterte les dijo que compartieran el libro.

"¿Estás soltera? ¿No estas separada? Pero ¿puedes decirle que esto es sólo una broma?", dijo en referencia a su marido antes de besarla. 

La multitud aplaudió pero en las redes fue duramente criticado. Por su parte, la mujer alegó por su parte que no hubo malicia en el beso, que pretendía "entretener y emocionar a la audiencia".