Es evidente que una de las principales estrategias de la campaña demócrata es utilizar el racismo y misoginia de Donald Trump como forma de mostrar que son la otra opción. 

Trump, que sumó recientemente varias denuncias por abusos, demostró una y otra vez su desprecio hacia las mujeres incluyendo a la candidata Hillary Clinton. 

El voto latino y femenino podría ser clave e histórico en esta disputada carrera presidencial que tendrá su final el próximo 8 de noviembre.