Miles de brasileños se movilizaron este jueves por la noche a la sede del Sindicato de los Metalúrgicos en Sao Bernardo do Campo, y desde uno de las ventanas del edificio, el expresidente Luiz Inácio Lula Da Silva saludó a sus seguidores.

La manifestación se lleva a cabo en respuesta a la orden de detención que dictó el juez Sergio Moro contra el exmandatario más popular de Brasil, quien pasaría la noche en la sede gremial junto a integrantes del Partido de los Trabajadores (PT) y la expresidenta Dilma Rousseff.

Al respecto, el líder del PT se asomó a una de las ventanas y si bien no habló, estuvo varios minutos saludando a la multitud.