El banco alcanzó un acuerdo extrajudicial por el cual pagará unos 40 millones de francos (38 millones de euros) y así evitar que continúe la investigación por lavado de dinero facilitado por esa entidad financiera.

El fiscal Olivier Jornot dijo que las investigaciones, que empezaron en febrero con la incautación de documentos en los locales del banco, demostraron que hubo un "déficit organizativo en la lucha contra el blanqueo de dinero".

La justicia suiza identificó cuatro expedientes en los que basó sus investigaciones y pudo determinar que en dos casos se cometieron infracciones, según consigna la agencia EFE.

Se trata del mismo banco que está acusado en la Argentina de ser el "facilitador" para el lavado de dinero, a través de 4.040 cuentas de argentinos sin declarar al fisco, con activos por 3.500 millones de dólares.