“Bolivia no está en guerra con Chile, Bolivia no quiere guerra con Chile”, aseguró el ministro de Justicia de Bolivia,  Héctor Arce, que compareció junto al canciller Fernando Huanacuni ante el consejo permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA). 

Después de aclarar que no se trata de "una guerra", las autoridades bolivianas sí exigieron la libertad y explicaciones al gobierno de Chile por las torturas que habrían recibido nueve funcionarios detenidos en el país trasandino. 

Se trata de nueve agentes aduaneros bolivianos capturados el 19 de marzo en la frontera a los que Chile acusó de haber ingresado en su territorio sin autorización y calificó como contrabandistas. 

“Hoy acudimos a la organización para poner en conocimiento de los países miembros y denunciar ante la comunidad internacional la injusta detención de nueve ciudadanos bolivianos”, subrayó el canciller Huanacuni.

Y agregó: “Al promediar las 14.00 del mismo día, los nueve funcionarios bolivianos fueron detenidos arbitraria e ilegalmente por Carabineros de Chile bajo hostigamiento y agresión con uso excesivo de violencia e incluyendo disparos de amedrentamiento con serios indicios de tortura”.

Imágenes de los funcionarios bolivianos detenidos
Imágenes de los funcionarios bolivianos detenidos

El titular de Justicia de Bolivia aseguró que “el Gobierno de Chile, motivado por actos de discriminación fundados en razón de nacionalidad, violando los derechos y garantías más fundamentales para los seres humanos y, especialmente, desconociendo el principio de reciprocidad y cortesía internacional, en lugar de cooperar con las autoridades bolivianas en la lucha contra el contrabando, brindó apoyo y conectó con los contrabandistas”.

Asimismo, el suboficial del Ejército boliviano, Carlos Hugo Solís, quien era parte del contingente anticontrabando que fue detenido por Chile, declaró que los Carabineros los “redujeron violentamente, estaban con armas y las dispararon a la izquierda y a la derecha de nosotros. Luego que nos redujeron las personas civiles que estaban en lugar golpearon a algunos de nosotros y todo ello en presencia de Carabineros, quienes no hicieron nada”.

“Como pueden comprobarse, los funcionarios injustamente detenidos, fueron lacerados, golpeados, vejados y reducidos de la manera más cruel e inhumana que no puede ser admitida en ninguna circunstancia”, aseguró Arce ante la OEA. 

Por su parte, el embajador chileno Juan Aníbal Barría, demandó réplica en el foro y aseguró que a su país no le causa sorpresa la postura boliviana.

“Estamos ante una actuación de Bolivia, inconsistente y sin ninguna credibilidad. La OEA no puede ser la caja de resonancia de reclamaciones individuales. (…) Chile se pregunta qué credibilidad puede tener un gobierno que invita al diálogo pero insulta a nuestras autoridades, que difunde falsedades como aquellas referidas a las condiciones en que fueron aprehendidos los nueve ciudadanos bolivianos”, cuestionó el diplomático chileno.

Inmediatamente Arce le salió al cruce y le espetó:  “¿Son falsas esa imágenes? ¿Es necesario encañonar a los oficiales del Ejército de un país amigo cuando están en un incidente de frontera? (…) ¿Es necesario tirarlos al suelo, ponerles la boca contra el piso, cargas las armas de fuego, disparar a su derecha y a su izquierda? ¿Eso es respetar los derechos de las personas?, ¿eso es respetar a un Gobierno vecino? (…) ¿Era necesario del uso de esa violencia?”.

Fuente: Nodal