"Estados Unidos primero", ese fue el mensaje del magnate republicano el día que juró como presidente e ingresó a la Casa Blanca. Y cuando se refería a primero no solo apuntaba a la economía y el proteccionismo que desea implementar, sino a ciertos "valores"- como quitar el financiamento a ONGs que concientizan y/o practican abortos- o incluso desmentir impactos ambientales. 

Pero uno de los temas que también estuvieron en su foco durante toda la campaña es la inmigración. No solo a partir de comenzar a construir un muro en la frontera con México sino también en discriminar a ciertas nacionalidades como peligrosas. 

Siria, Irak, Irán, Afganistán, Yemen, Libia, Somalia y Sudán son los países que están "en carpeta" en un proyecto de la Casa Blanca para denegar la visita y/o permanencia en Estados Unidos. 

Si bien el plan no fue anunciado, ya son varios los medios locales que se hacen eco de esta nueva propuesta republicana. La justificación estaría basada en el terrorismo; aunque muchas veces se encierra en la confusión con equipararlo al islamismo. 

Por otro lado, la Casa Blanca también se pronunciaría en contra de los Hermanos Musulmanes a los que pasaría a considerarlos como "grupo terrorista" como lo hacen hasta ahora Egipto, Arabia Saudita y Rusia.