La policía legislativa de Brasil le puso freno violento a la manifestación que se opone a que el Parlamento apruebe el aumento de la edad de jubilación de los trabajadores del sector público.

Representantes de la Federación Nacional de Policía Federales indicaron que están en contra de la reforma y no solo porque perjudica al sector seguridad. Según O Globo, el informe de la impopular reforma todavía no estaba cerrado. 

El tema es que el proyecto original del gobierno de Michel Temer es proponer una edad mínima de jubilación de 65 años para hombres y mujeres, pero el equipo negociador quiso una "reducción" para las mujeres en los lapsos de cotización. Los legisladores del partido gobernante, sin embargo, también querían aumentar la edad para el retiro.

El gobierno de Brasil tiene hace ya varios meses varias reformas neoliberales para reducir la inversión social y dar marcha atrás al estado de bienestar alcanzado durante las administraciones de Luiz Inácio Lula Da Silva y Dilma Rousseff.

Aún así, la casi inexistente popularidad del mandatario, quien no llegó al poder por elecciones sino por un controvertido impeachment contra Rousseff, dio pie para multitudinarias manifestaciones en su contra y un agrio contexto político que aviva la violencia y el conflicto social.