El equipo de C5N fueron detenidos por las fuerzas ucranianas en un aeropuerto militar en la localidad de Bohorodchany cuando se encontraban grabando un informe. El periodista Gabriel Michi y el camarógrafo Leo Da Re fueron rodeados por un grupo comando que les dijeron que no podían estar en el lugar y les cortaron la comunicación.

El grupo comando les informó que no podían estar en ese lugar y por eso fueron trasladados a una unidad militar donde fueron recibidos por una persona que les explicó la situación y fueron interrogados.

En ese lugar fueron retenidos durante 10 horas y fueron nuevamente interrogados por un agente de inteligencia ucraniano "de muy mala manera", explicó Gabriel Michi en diálogo con C5N. Durante todo ese tiempo fueron incomunicados

Avisado de la situación por las autoridades de C5N, el canciller argentino Santiago Cafiero se puso al frente de las gestiones diplomáticas y pidió a Ana Laura Cachaza, directora de asuntos consulares en Buenos Aires, y a las embajadas argentinas ante Ucrania y Polonia, especialmente a Elena Mikusinski y Ana María Ramírez, que era prioridad resolver este tema.

“Teníamos un auto de prensa con leyendas de prensa en todos lados, con carteles. Nos dijeron que no, que esperemos porque no hablaban inglés, había uno que hablaba poco. Les explicamos, mostramos la identificación, el pasaporte, las acreditaciones de prensa, las cartas del canal. Al rato, llegó un grupo comando de más de 20 personas que nos rodeó, con ametralladoras y armas largas. Nos empezaron a interrogar, nos dijeron que no podíamos estar ahí, que era secreto, les mostramos que el GPS nos había llevado y se dieron cuenta que sí. Y nos dijeron que íbamos a tener que ir a declarar”, detalló sobre cómo se generó la tensión. “Nos tenían detenidos ilegalmente, violando todo tipo de derechos”, afirmó luego.

Tras la intervención de Cancillería argentina, el equipo del canal de noticias fue liberado, menos Leo Da Re que, por ser residente en Rusia, fue nuevamente liberado y finalmente deportado.