El primer ministro Manuel Valls aseguró ante la Asamblea Nacional de Francia que "estamos en guerra, una guerra nueva en la que el terror es el primer objetivo y la primera arma", advirtiendo sobre nuevos atentados en los que podrían usarse "armas químicas o bacteriológicas".

Buscando la aprobación del legislativo para prolongar el estado de emergencia en el país durante tres meses, como lo había anunciado el presidente Francois Hollande, tras los atentados en París que costaron 129 vidas y centenares de heridos, dijo que "es una guerra en la que el frente de combate está en el corazón de nuestra vida cotidiana".

Valls indicó que se trata "una guerra planificada y llevada a cabo por un ejército de criminales" en la que quienes "dan las órdenes no tienen límites: fusil de asalto, decapitación, bombas humanas, armas blancas... o todo a la vez, perpetrados por individuos, comandos particularmente organizados", declaró.