Mientras los argentinos -en general- pasamos Nochebuena atosigándonos con comidas y bebidas alcohólicas, tirando cohetes y plata y peleando eventualmente con familiares que no vimos ni en figuritas en todo el año, los islandeses tienen una costumbre mucho más saludable para el estómago y el espíritu.

Es tradición en Islandia regalarse libros después de cenar y pasarse el resto de la noche leyendo con calma y tranquilidad, compartiendo en familia o con amigos las obras literarias obsequiadas.

"Para mí no hay Navidad sin alguna de las nuevas novelas que salen para esas fechas", comentó al respecto el embajador islandés Kristján Andri Stefánsson.

De hecho, así como en la Argentina jugueterías y regalarías hacen sus mayores ventas por esta época, son las editoriales las que hacen mayor cantidad de lanzamientos y es en las librerías de Islandia donde se ven colas y acumulaciones de clientela ávida por hacerse de novedades y joyas literarias.

“Todo el mundo tiene un libro en su estómago”, dicen los islandeses sobre este saludable e imitable hábito en el país con más cantidad de libros publicados por habitante, en todo el mundo.