"Me parece fantástico que las mujeres sigamos peleando por nuestros derechos. Ha habido una desigualdad durante muchísimos años hacia el género y creo que hemos avanzado y ganado muchas batallas, pero todavía queda un largo camino por recorrer"  comenzó el discurso la modelo en Todas las tardes, hasta ese momento bastante acertado.

Pero no iba a pasar mucho tiempo hasta que empiece a mezclar conceptos patriarcales con el feminismo. "No me gusta cuando la mujer, en esta lucha, pierde feminidad. Las mujeres somos distintas" dijo y exbozó una frase muy similar a la que Juanita Viale había brindado en una entrevista con Infobae.

"Creo en la lucha por la no desigualdad, pero no en ocupar los mismos lugares que los hombres porque no somos iguales. No tiene que ver con el lugar en el que uno está. Vinimos al mundo para diferentes cosas, algunas las podemos compartir, pero otras no", aseguró Mazza y aquí es el punto donde es absolutamente contradictoria.

"Yo quiero tener la posibilidad, si quiero, de acceder al mismo trabajo que tiene cualquier hombre, con el mismo sueldo, que esa es una gran diferencia. Pero a la vez, me encanta que me abran la puerta del auto. Ese acto de caballerosidad no me hace a mí menos mujer. Al contrario, yo me siento mucho más respetada, valorada, cuando un hombre tiene un gesto de caballerosidad. Y eso no me gusta que la mujer lo pierda. Eso de 'no, a mí no me pagues la cuenta, porque soy menos'. No, a mí pagame la cuenta, abrime la puerta. Me parece que esos actos de caballerosidad no te ponen en un lugar menor. Al contrario, te elevan, porque las mujeres somos preciosas y nos tienen que cuidar" cerró.