En un concierto en Dublin donde sorprendió con su particular vestuario dejando a la vista su enorme escote, Nicki Minaj se conmovió porque uno de sus pequeños fans estaba llorando. Entonces, decidió subirlo al escenario y consolarlo.

Pero cayó en la trampa del niño, quien de repente dejó de lagrimear y festejó estar frente al escote de su ídola. Por la cómica reacción del nene, Minaj subió el video en las redes sociales.