En el programa de Doman del Grupo Clarín le dieron micrófono a un hombre que se hacía pasar por el un supuesto novio de Rocío Marengo.

La panelista habló para aclarar que en realidad se trata de un acosador que hace mucho tiempo la persigue.

Más allá de las polémicas posturas que muchas veces tiene la mediática, es menester aclarar que este tipo de situaciones que a menudo viven las mujeres, son completamente deleznables y no tienen justificación, le suceda a quien le suceda.

Los medios tienen que ser responsables a la hora de darle micrófono a ciertos sujetos y, sobre todo, enviar un mensaje muy claro en contra del acoso. Esa violencia contra la mujer debe ser repudiada y no alentada.