Después de confirmar que se quedaba en Vélez, Mauro Zárate sorprendió a propios y ajenos al confirmar el pase al club de la ribera. Tras ellos llegó la decepción de los fortineros e incluso de su propia familia. Su mujer Natalie Weber dijo que se trata de un trabajo, que priorizó su carrera y que por suerte mermaron las amenazas para con ella y sus hijos.