En el almuerzo con Mirtha, Alé dijo que fue horrible lo que vivió porque estuvo preso, que perdió su libertad y estuvo muy sedado por las pastillas que le daban.

"Sentía que venía a salvar el mundo y que mi mujer era mi socia en eso. Le daba mucha importancia al mal por sobre el bien. Vivíamos de hotel en hotel escapando de esas visiones que tenia", relato en la mesa.

Fue un "brote psicótico con delirio místico", aclaró.