Corría la década de 1990 cuando Daniel Agostini saltaba a la fama como vocalsita del grupo Sombras, dejando una larga lista de hits tropicales que trascendieron el paso del tiempo. Después vinieron los escándalos mediáticos, su conflictiva relación con Nazarena Vélez y luego su carrera solista.

De grandes cualidades vocales, Agostini ya había mostrado su capacidad para interpretar boleros latinos en su versión de la canción "A puro dolor".