Calu Rivero había decidido tomar distancia de los medios e incluso llegó a vivir un tiempo en el exterior. Luego de mantener un absoluto silencio,lo rompió y decidió contar el porqué de su distanciamiento con el país y su hermetismo: había sido acosada por Juan Darthés, su compañero de la ficción Dulce amor. 

Luego del revuelo que generó su declaración, Juan Darthes recibió protección y llegó a denunciar a su colega por "daños y prejuicios". En una charla con Estelita (el personaje que interpreta Jey Mammon) y con la sexóloga Alessandra Rampolla, Calu explicó lo difícil que fue animarse a contar lo que le había pasado y cómo vivió todo este escándalo.

"El dolor modifica a las personas, es así. Yo cambié mucho, me volví una persona mucho más contenida y lo digo con mucha pena, perdí mucha gracia, perdí espontaneidad. La estoy recuperando y estoy haciendo un trabajo muy fuerte para volver a mí. Hace cinco años que hago terapia", dijo la joven en el teatro Regina.

En medio de este escándalo, la actriz contó que Darthés le inició una demanda por daños y perjuicios: "Mis abogados ya respondieron a esa demanda y yo estoy muy tranquila, porque sé que va a haber Justicia y que la verdad sale a la luz, no hay otra forma. Yo siempre voy con la verdad, no tengo ninguna necesidad de inventar todo esto. Todo el dolor que atravesé, la exposición, no hay necesidad alguna".

Cuando se generó el debate, Eva de Dominici fue una de las pocas personas que salió a defender al galán de televisión. "Lo están condenando como si fuera un monstruo. Hay mucha gente que no se anima a hablar y defenderlo", dijo en una entrevista con Pamela a la tarde. 

"Me hizo daño, me dolió. Me pareció muy fuerte que una actriz de una generación incluso más joven que viene con un chip distinto esté tan directamente bancando el patriarcado", dijo Calu sobre su colega. Pero, la ex de Joaquín Furriel le pidió disculpas en privado y luego las hizo públicas. 

"Hace un mes o dos estaba viniendo a la función de Derechas y recibo un mensaje de ella, me dijo si podíamos hablar, me pidió disculpas y entendió la gravedad de lo que hizo. Yo le dije que me había hecho mal, pero no la había juzgado. Traté de entender por qué lo había hecho, pero le agradecí por el daño que estaba reparando en este momento. Esa función la hice súper emocionada, por la hermandad de dos mujeres que quieren la igualdad entre nosotros", finalizó Rivero.