Al parecer Horacio Cabak no termina de entender las reglas del juego que eligió jugar. Al menos eso se desprende de sus declaraciones y actitudes.

La novedad fue que prefirió ausentarse de Polémica en el Bar porque no quiere hablar más del tema de sus infidelidades y posterior separación. 

Pero además adelantó que iniciará acciones legales contra Rocío Oliva porque dio por sentado que él le había sido infiel a su esposa cosa que en realidad confirmó la misma Verónica Soldato.

Pero lo que llama la atención es cómo a pesar de todo lo que está pasando no termina de entender que Verónica es Verónica y que si ella eligió compartir su vida con él eso no la transforma en una posesión. 

Cuando el cronista le preguntó por ella el contestó muy seriamente: "Mi mujer es mi mujer". Mas allá de lo posesiva que suena la frase, a juzgar por las declaraciones casi diarias de Verónica a distintos periodistas de espectáculos, la realidad estaría indicando otra cosa.