La cantante estadounidense Britney Spears decidió internarse en una clínica de salud mental por la angustia que le provocó la enfermedad de su padre, según reveló el medio especializado en famosos TMZ.

Spears, de 37 años, ingresó en la clínica la semana pasada y está previsto que permanezca internada durante un mes, según las fuentes consultadas por la publicación, que indicaron que el estado de la cantante "es serio y no mejora". El origen de su angustia está en los problemas de salud de su padre, Jamie Spears, que ha sido sometido a dos operaciones para solucionar complicaciones en el intestino y el colon.

La cantante compartió en la noche del miércoles una imagen en su cuenta de Instagram con el texto: "Enamórate de cuidar de tu mente, cuerpo y espíritu". Acompañando a la imagen, Spears comentó: "Todos necesitamos tomarnos tiempo para un poco de 'tiempo para mi'".

Britney Spears on Instagram: “We all need to take time for a little

Los problemas de salud de su padre provocaron que a principios de enero la cantante suspendiese de forma "indefinida" todas sus actuaciones. Spears tenía previsto empezar en febrero su segundo espectáculo permanente en Las Vegas, llamado Britney: Domination, con 32 shows programados entre febrero y agosto y con el que, según People, se iba a embolsar medio millón de dólares por actuación.

El padre de Spears tuvo un importante rol en los momentos más duros de la vida de la cantante, asumiendo su tutela cuando a principios de 2008 fue ingresada en un psiquiátrico y perdió la custodia de sus hijos. Entonces Jamie Spears fue quien asumió el cuidado de los pequeños,  Sean Preston (2005) y Jayden James (2006), que Britney tuvo con el bailarín Kevin Federline, de quien se divorció en 2007.