"Hace casi tres años, este amigo de toda la vida vino a Buenos Aires, nos reencontramos y nos preguntamos: '¿Te gustaría ser madre?'. 'Sí, un montón'. '¿Te gustaría ser padre?'. ‘Sí, un montón'. Entonces dijimos: ‘¿Por qué no tenemos un hijo?’. Y es Juan", dijo Agustina Kämpfer en Nosotros a la mañana. 

"Agustín estuvo ese verano por unos 10 o 12 días. Dijimos lo hacemos ahora porque después ni idea (cuándo nos vemos). Era poca la probabilidad. En la primera es muy aislada la posibilidad, pero nos pasó", dijo y concluyó: "No fue inseminación, fue por concepción natural, impulsados por el deseo que teníamos los dos de tener un hijo".