Se llama Almendra Sheira, es una artista plástica mexicana que dibuja mucho y lo hace sin tabúes. En sus obras toma como base los ritos y creencias de los pueblos prehispánicos de América y mezclándolo con sexo, animales y sangre, consigue llamar la atención.

En la historia del sexo, la moral llega a imponer orden y frenar los impulsos. Sheira contraataca con un alter ego muy particular: Rurru Mipanochia.

"Rurru es una cosa que anda ahí por la vida haciendo garabatos y tocándose la panocha, intentando que algunas personas con pene le dejen meter sus deditos en el ano o un strap on…o así. Le di ese nombre porque se me hacía muy divertido que otras personas lo dijeran, lo pronunciaran… no sé si “panocha” sea igual en Argentina, es un sobrenombre que se le de a la vagina en México. Se me hacía muy gracioso escuchar a las personas decirlo. Y me gustaba ver como les causaba gracia a los que lo decían, me gusta ver a la gente reír, es contagioso ".

Sus dibujos giran al rededor de un mundo de colores, penes, tetas y segregaciones. "El sexo es un tema que me gusta y creo que sigue habiendo mucha tela de donde cortar", indica Almendra. Con influencias de Egon Schiele, Beardsley y algunos ilustradores Shunga, ella se deja andar.

"No hay límites, cada quién es diferente y por lo tanto cada persona tiene sus propia manera de mirar el mundo y ejercer su sexualidad como le plazca. Aunque creo que también debe ser sin dañar a terceros, siempre consensuado. Yo no estoy de acuerdo con la pedofilia o la zoofilia, porque prácticamente estás imponiéndote y obligando a hacer cosas que el otro no quiere, pero tampoco me doy título alguno para poder o si quiera atreverme a juzgar a nadie".

Pero los líneas y contrastes del sexo libre se mezclan y confunden mucho. Y en el medio de la entrevista, Almendra se sincera y va a su pasado. Ella, que explota a la sexualidad sin demasiados mambos, escupe una anécdota y nos deja estremecidos.

"En experiencia propia, una persona abusó sexualmente de mi hermana y de mi, cuando éramos muy peques, unos 4 y 6 años tendríamos, y la verdad es que no le guardo ningún rencor, y es enserio. Además de que ni me acuerdo tanto –mi hermana sí recuerda más-".

Y acá plantea la polémica: ¿deben los chicos saber de qué se trata el sexo para evitar esta clase de abusos?

"Creo que esto es un problema de comunicación, porque por tener tan `controlado´ el tema sexual, a lxs niñxs no se les explica nada de nada, y por eso también pasan éste tipo de situaciones. Si tú de verdad a un niñx le explicas la onda de las relaciones sexuales, van a estar más vivxs si alguien se quiere pasar con ellxs".

En México mueren 5 mujeres al día en manos de la violencia de género. Y ya que la teníamos cerquita, le preguntamos cómo lo vive ella que, además de mujer, es una artista que dedica su vida a quitarles tapujos, prejuicios y etiquetas al sexo.

"Es realmente preocupante, y también lo es el transfeminicidio. En mí país el sexo tiene una profunda doble moral. Hay propagandas de mujeres que posan con el culo parado, y toda esa onda de la publicidad hetero que está al boom de lo sexual y que alimenta al machismo y a esta clase de crímenes. Pero bueno, también hay personas que estamos intentado librarnos de eso. Creo que cualquier persona debe ejercer el rol que le plazca como persona, o cosa o como le considere. No estoy de acuerdo con las etiquetas, pero de todas formas la gente va a seguir utilizándolas. Aunque hay muchxs que no lo hacen. `Si tenes vagina y te follas muchas personas, eres bien puta´, y pues sí. Jajaja. A mi me gusta ser bien puta, si a eso se refieren".