El relevamiento CEPA arrojó las siguientes conclusiones: "En primer lugar, hay un sustancial aumento en la cantidad de despidos y suspensiones con 15.137 nuevos casos – siendo que en junio se contabilizaron 11.721 casos-. Resaltan en este aspecto, la incidencia del sector privado, que motorizó más del 93% de los despidos y suspensiones, siendo además central el peso de estas últimas sobre el total".

Posteriormente completan: "Se manifiesta, en segundo lugar, un significativo incremento en los despidos de la industria (con 4.324 nuevos casos) y un marcado aumento de la cantidad de suspensiones también en el sector manufacturero, que ascendieron a 7.067 casos. Respecto del sector servicios, los guarismos se han mantenido en los niveles del mes anterior, en valores elevados respecto de los relevamientos anteriores".

A su vez sostienen que "en el mes de julio los despidos se concentraron particularmente en 6 actividades, que explicaron el 74% de despidos y suspensiones. Se trata del sector textil, automotriz petrolero, frigorífico, electrónica y electrodoméstico y sector servicios –comercial-".

Sector textil: "Como resultado de la apertura de importaciones hubo 2.520 suspensiones y 111 despidos sólo en el mes de julio. En esta línea, resultan sugestivos algunos casos de llano incumplimiento del acuerdo firmado entre grupos empresarios y el gobierno nacional por 6 meses, para evitar despidos. El caso Alpargatas con 48 despidos y 550 suspensiones en julio –como resultado de un ajuste productivo por la apertura importadora- contradice directamente el compromiso asumido el 9 de mayo".

Sector automotriz: "Las suspensiones también fueron importantes en empresas como IVECO, donde llegaron a 500 trabajadores. En el caso de la automotriz extranjera Renault, es curioso que se hayan aplicado  vacaciones obligadas a cerca de 2000 operarios. En efecto, si los retiros voluntarios oficiaron de despidos encubiertos, las vacaciones obligadas están operando como suspensiones encubiertas, en un contexto de parada productiva que no tiene señales –en el corto y mediano plazo- de recuperarse".

Sector petrolero: "Se contabilizan en julio 1.353 despidos, donde las empresas petroleras argumentan altos costos, y el escenario marca una profundización de la conflictividad en la Patagonia. Continuando con el rubro energético son preocupantes los 500 despidos en YPF –acompañados de bajas de equipos-, mientras que en el caso de EDESUR, beneficiada con aumento de tarifas, se produjeron sendos despidos de trabajadores contratados, alcanzando aproximadamente 200 casos".

Sector industria frigorífica, electrónica y electrodomésticos: "La primera acumuló 1.063 despidos en el mes, previéndose más despidos en el futuro, afectada por la menor faena y menor producción que resultan en mayores costos, sumado al impacto del tarifazo. La segunda, sufrió 1.042 despidos y suspensiones, se ha visto afectada por la falta de ventas en el mercado interno y la importación de heladeras particularmente desde Brasil".

Sector comercial: "El sector comercial ha sufrido despidos en casi todos los centros urbanos. El impacto de la caída del salario real conjuntamente con los despidos producidos ha sido afectado seriamente la evolución del sector, sumado al impacto del aumento de tarifas en diversos tipos de comercios".

Sector público: "Por otro lado, en el sector público los despidos han sido el resultado de la decisión del gobierno nacional de no renovación de los contratos que vencían al 30/6 para los trabajadores de la educación, continuando con lo realizado en diciembre y enero últimos".