A una semana del anuncio del aumento de hasta un 36 por ciento en la tarifa del gas, Juan José Aranguren anunció que el precio del gasoil bajará un 2,6 por ciento y el de las naftas 0,1 por ciento entre el martes y el miércoles "se verificará el cambio de precios en las estaciones de servicio". 

Mientras el precio del petróleo se derrumbaba en todo el mundo, el Gobierno Nacional aplicaba sucesivos aumentos en el precio de los combustibles argentinos, el último de los cuales fue en enero, cuando aumentaron en promedio un 8 por ciento.

Ahora, como “una buena”, el ministro de energía hizo el anuncio de esta mínima baja que regirá hasta junio, cuando los precios “vuelvan a ser revisados”.

Aranguren explicó que la baja es por la aplicación periódica de una fórmula que combina la variación del precio del petróleo crudo, del biocombustible que se utiliza como mezcla con las naftas y el gasoil, además de la cotización del dólar en el mercado local. 

Además precisó que "los nuevos valores van a regir durante el trimestre abril, mayo y junio, a cuyo término volverán a ser revisados" y que el criterio para los precios en el mercado local forma parte del acuerdo con las empresas productoras y refinadoras con vistas a la convergencia con la cotización internacional del crudo en el plazo más corto posible. 

En relación al Gas Natural Comprimido -GNC-, la cartera de Energía dispondrá por resolución la posibilidad l estacionero de comprar el gas directamente a los productores, en vez de hacerlo por las distribuidoras, como era hasta el momento, lo que podrá redundar en precios más bajos al consumidor.