El presidente de la asociación de propietarios de carnicerías no quiso, no pudo o no sabe cual es el margen que les queda, justamente, a los propietarios de las carnicerías.

Reynaldo se enojó un poco con la situación ya que parecía que era un secreto que no se podía revelar, y Williams no ayudaba mucho con sus evasivas.

Tampoco le estaba preguntando cuánto ganaba él ni una cifra exacta sino que al menos le dijera un promedio, pero no lo consiguió.