En los últimos días se conoció a través de los medios una especie de conato de enfrentamiento entre la Unión Industrial Argentina (UIA) y el Gobierno Nacional, con el ministro Francisco Cabrera y el presidente Mauricio Macri como principales protagonistas.

Tratando de cortar por lo sano con este escarceo mediático que a todas luces aparece como ‘antinatural’ (¿empresarios vs gobierno de empresarios?), el Ejecutivo citó para el lunes a la entidad conducida por Miguel Acevedo para “sellar la paz” que convenga a ambos bandos.

Del lado oficial no prometen mucho como prenda de amistad, pero por los industriales ya hablan de entregar uno de los suyos con tal de volver a la ‘pax macrista’ que, en definitiva, facilita los negocios en común.

¿El chivo expiatorio? José Ignacio De Mendiguren, empresario, miembro de la junta directiva de la UIA y diputado nacional por el massismo, y como tal –o tales– fuerte crítico de las políticas económicas impulsadas por Macri.

En efecto, la conducción de la cámara industrial prometió “encapsular” al legislador, según asegura Ámbito.com; es decir, aislarlo y al mismo tiempo neutralizar sus críticas referidas a "invasión" de productos importados y "crisis terminal" de las economías regionales.

Conocida la especie, el propio De Mendiguren salió a decir lo suyo por FM Blue: "Pueden encapsular cualquier cosa, menos la realidad", agregando su habitual catarata de críticas a las políticas instrumentadas desde el Gobierno Nacional.

"Este gobierno de Cambiemos no tiene nada, ésto es sigamos", dijo el extitular de la entidad fabril, al tiempo que reiteró que el alerta por la apertura irrestricta de importaciones y el constante envío de remesas al exterior porque, afirmó, "la fuga de capitales no ha parado".