Con la economía en crisis a partir de las medidas económicas dispuestas por el Gobierno de Mauricio Macri en su primer año de gestión, cada vez hay más pobres y así lo ratifica un estudio realizado por la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL).

De acuerdo con el informe, la Canasta Básica Total (CBT) en la Ciudad de Buenos Aires, que mide el umbral de pobreza, se incrementó en un 34,8 por ciento en el 2016, lo que significa que un porteño que en el 2015 necesitaba 8.921 pesos para no ser pobre, ahora requiere 3.100 pesos más de ingresos.

Vale tener en cuenta que hasta diciembre, el salario mínimo, vital y móvil se ubicaba en 7.560 pesos, y que subió a 8.060 pesos a partir del corriente mes.

Por su parte, la Canasta Básica Alimentaria, que comprende sólo los alimentos esenciales para una familia tipo y que mide el umbral de indigencia, ascendió en diciembre a 5.243,40 pesos, un 0,7  por ciento más que en noviembre, y 33,2 por ciento en comparación con el año pasado.

Los ingresos por hogar para superar el umbral de indigencia surgen de multiplicar el costo de la CBA del adulto equivalente por la cantidad de adultos equivalentes que conforman el hogar.

Las canastas valuadas en el informe de FIEL corresponden a las determinadas por el INDEC en función de los hábitos de consumo de la población considerándose los requerimientos kilo‐calóricos y proteicos imprescindibles para que un hombre adulto de entre 30 y 59 años de actividad moderada (adulto equivalente), cubra durante un mes esas necesidades.