En el informe realizado por 678, se ve cómo los mismos que ahora hablan de "bombas", como Bonelli, calificaban a las verdaderas bombas económicas como el blindaje aliancista de 2000, de "ventajoso" e "imprescindible".

Pero es el propio Kicillof quien desarma la hipótesis explosiva del Grupo Clarín al advertir: "Hablan de una bomba que le estamos dejando al próximo gobierno... Pero el primer error que están cometiendo es pensar que ya ganaron las elecciones y que el próximo gobierno va a ser de ellos".

"No estamos armando una bomba porque estamos pensando quedarnos, no irnos", cerró el ministro de Economía.