Juan José Aranguren decidió poner en marcha la llamada “Revisión Tarifaria Integral” (RTI) de Edenor y Edesur que derivará en un nuevo ajuste de tarifas en los últimos meses de 2016; en plena contradicción con la promesa de Alfonso Prat Gay que señaló que no iba a ver más aumentos. 

Aranguren  instó a que el ENRE (Ente Nacional Regulador de la Electricidad) inicie el programa de las RTI y salga a contratar a consultoras privadas para que analicen  los planes de inversiones que llevarán adelante Edenor y Edesur durante el período quinquenal 2017- 2022.

Las consultoras tendrán que “verificar la razonabilidad y consistencia de los planes presentados por las distribuidoras segregando los montos específicos destinados a la expansión del servicio, la renovación de las redes y la mejora de los niveles de calidad del suministro eléctrico”.

Los encargados de definir las RTI “deberán considerar costos de operación y mantenimiento decrecientes, toda vez que por la realización de inversiones destinadas a mejorar la calidad de servicio, se producirán disminuciones en el número de interrupciones”. Y deberán ser consultoras con  más de 10 años de experiencia en el tema y haber participado en “la implementación de dos revisiones tarifarias integrales de distribución eléctrica en mercados de similar complejidad”.