El día 29 de Febrero se vence el plazo impuesto por Thomas Griesa para que los fondos buitre respondan sobre la oferta del gobierno argentino. Para el día siguiente Griesa convocó a una audiencia donde las partes deberán exponer sus argumentos sobre la medida cautelar dictada por el juez, que impide el cobro a los acreedores que habían entrado al canje 2005-2010.

La semana pasada el magistrado había indicado que levantaría el stay en caso que las leyes Cerrojo y de Pago Soberano fueran derogadas, y que Argentina pague a los fondos buitre que hayan aceptado la oferta antes del vencimiento.

Para que Argentina logre pagar a los buitres deberá emitir deuda y recaudar los fondos necesarios para pagarles a quienes aceptaron la oferta, y el Congreso Argentino debe sesionar y derogar las 2 leyes. El apriete de Griesa le dará la excusa al gobierno para presionar a los legisladores que no acepten derogar las leyes, bajo la idea de que si se niegan a derogarlas el país no saldría del “default técnico” impuesto por el juez.

El ministro de Hacienda y Finanzas, Prat Gay, expresó que “la determinación de Macri es dejar esto atrás”. El ministro no lo explicitó, pero de esta manera el país podría “reinsertarse en el mundo”, es decir la volver a la lógica del sistema financiero internacional y así recurrir al endeudamiento.