Luego de las reformas previsional y tributaria, que ya fueron sancionadas, el Gobierno ahora presiona con la reforma laboral para terminar de saquear a los argentinos, y en este marco, el Indec difundió alarmantes cifras sobre la caída del empleo y el crecimiento del trabajo informal.

De acuerdo con el organismo, se desplomó el trabajo asalariado en blanco y se dispararon tanto los trabajadores en negro como los precarizados, desde el tercer trimestre del 2016 al mismo período del 2017.

Los datos surgen de la Encuesta Permanente de Hogares, que reveló que la participación de los asalariados en todas las actividades, registradas e informales, en relación de dependencia o como independiente, y en el sector público, se achicó del 75,4 por ciento al cierre del tercer trimestre de 2016, al 74,5 por ciento un año después, convirtiéndose en la menor proporción en 12 años.

El Indec reveló la suba del empleo informal justo cuando el Gobierno presiona por la reforma laboral

Por su parte, al cierre del tercer trimestre había 19,4 millones de personas ocupadas, de las cuales 14,4 millones lo hacían en condición de asalariado y poco más de 4,9 millones como independiente.

A su vez, los trabajadores que están en blanco disminuyeron en casi 36.000 personas, principalmente por la enorme cantidad de despidos registrados en la actividad petrolera, la industria electrónica de Tierra del Fuego, y también en otros sectores, como la actividad textil y del calzado, entre otras.

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Del mismo modo, en negro se crearon unos 91.000 puestos netos. La representatividad de los ocupados informales (sin descuento jubilatorio) en el mercado total de asalariados se elevó de 33,8 a 34,4 por ciento, la mayor relevancia en cuatro años; mientras que los "no asalariados", que comprende a los autónomos, monotributistas y monotributista social, se expandió de 24,6 a 25,5 por ciento.

Al respecto de las desalentadoras cifras, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, argumentó que se deben al “alto costo del trabajo, con cargas patronales que se asegura duplican el promedio de la región y de los países con los que la Argentina aspira a competir”.