Concluida la reunión de la Mesa de Diálogo para la Producción y el Trabajo, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, brindó una conferencia de prensa durante la cual anunció un "compromiso" acordado entre Gobierno, sindicatos y empresarios.

Al final de un año en el que se produjeron decenas de miles de despidos, tanto en el ámbito público como en el privado, los empresarios cedieron en acordar "mantener los puestos de trabajo" hasta marzo de 2017; ni más ni menos que cuatro meses...

"Hemos avanzado en concordar con ellos mantener los puestos de trabajo hasta marzo de 2017, lo hemos planteado en conjunto con empresarios y gremios, poniendo especial énfasis en la generación de empleo", afirmó Triaca.

"Tenemos que poner la productividad como una batalla de todos, no de unos contra otros. Habrá que ver si hay convenios que están frenando esto", agregó el secretario de Coordinación de Políticas Públicas, Mario Quintana, en referencia a "temas estructurales que hacen a la competitividad de la Argentina".

La mención a "convenios que están frenando" la competitividad por parte del secretario Quintana, da idea de la ofensiva iniciada por el propio Mauricio Macri contra los convenios colectivos de trabajo y las condiciones laborales en general (incluyendo la reforma a la Ley de Riesgos de Trabajo).

Como se ve, el Presidente ha enviado a todos sus funcionarios a instalar la liquidación de los convenios colectivos como algo "necesario" para avanzar en la competitividad empresario, lo que es lisa y llanamente optimizar la tasa de ganancia empresaria sobre la base de seguir atacando los salarios y las condiciones laborales.