Con una inflación anual calculada entre el 40 y el 44 por ciento, la mayoría de los gremios está cerrando negociaciones paritarias –hasta marzo o abril de 2017– por debajo de ese porcentaje; incluso, por debajo del 40 por ciento, lo que implica una pérdida del poder adquisitivo bastante pronunciada.

Bajo el gobierno de Mauricio Macri, sin embargo, las entidades bancarias no corren con la misma ‘suerte’: el Banco Central autorizó a los bancos a realizar una nueva suba en el costo de las comisiones que cobran, en torno a un 20 por ciento para septiembre próximo, aunque no hay techo para las subas.

Así, las entidades financieras podrán ajustar sus precios –y sus ya exorbitantes ganancias– por segunda vez en el año en curso, ya que el mes pasado los aumentaron también en un 20 por ciento; entre ambos ajustes, el aumento sumará el 44 por ciento de aumento. Es decir, igualando o superando a la inflación anual prevista para este año.

Para el portal especializado Ámbito.com, el plan de la mayoría de las entidades es volver a aplicar aumentos de entre el 20 y el 25 por ciento en el último cuatrimestre del año, que terminarían por redondear un ajuste de hasta casi 50 por ciento a lo largo de 2016.

Es que el BCRA, dirigido por Federico Sturzenegger, en esta ocasión no impone topes, como sí ocurrió en junio, con lo cual en septiembre las comisiones y los precios de los productos bancarios podrán sufrir una suba del 38 por ciento, según un relevamiento que realizó el insospechado diario La Nación.

El mismo diario da cuenta del Informe de Bancos del Banco Central a abril pasado –último disponible–, por medio del cual nos enteramos que el sistema financiero argentino sumaba ingresos por comisiones por 23.013 millones de pesos en el primer cuatrimestre del corriente año, lo que implica un 26,3 por ciento más que en igual periodo del año pasado.