Los precios de ingreso de la mercadería danesa son bajísimos porque, desde que el gobierno ruso bloqueó el ingreso de carne porcina europea en 2014, se produjo una sobreoferta descomunal de ese producto en la UE-28 (lo que obligó a las compañías cárnicas europeas a salir a buscar nuevos mercados para deshacerse de los sobrantes de mercadería).

Se vende en supermercados descongelada como “fresca”. Quejas de los productores locales por déficit de información al consumidor

Parte de los ingresos se destinan a la Patagonia porque la normativa vigente dispuesta por Senasa prohíbe el ingreso a esa región de cortes provenientes de zonas que no sean libres de aftosa sin vacunación. Pero otro tanto se distribuye en grandes cadenas de supermercados de la zona pampeana (entre las cuales se incluye La Anónima de la familia Braun).

“En un supermercado de La Anónima en Venado Tuerto (Santa Fe) constatamos que se está vendiendo carré de cerdo descongelado y cortado con una advertencia que indica no volver a congelar. Pero romper la cadena de frío no es una práctica aconsejable”, indicó hoy Juan Uccelli, presidente de la Asociación Argentina de Productores Porcinos.

“Nosotros podemos competir con la carne importada. Pero para eso los consumidores deberían poder tener la información necesaria que les permita elegir entre un corte que lleva varios meses congelado con otro fresco que es apenas un poco más caro”, añadió.

Muchos de los cortes daneses ingresados son carré y bondiola congelada, los cuales luego son descongelados para ofrecerlos como carne fresca en cadenas de supermercados (en algunos casos sin la advertencia correspondiente de que el mismo no debería volver a congelarse para evitar riesgos sanitarios).

Las autoridades sanitarias argentinas habilitaron a 18 frigoríficos daneses para exportar carne porcina al mercado local, la mayor parte de los cuales son controlados por la corporación Danish Crown.

Los últimos datos oficiales publicados por Senasa indican que en los primeros cuatro meses de 2016 ingresaron cortes porcinos por un total de 3151 toneladas, de los cuales la mayor parte (2720) provinieron de Brasil.

No se está, de todas maneras, registrando un ingreso masivo de carne de cerdo importada, tal como ocurrió en 2012 y 2013 con importaciones totales anuales por 30.604 y 16.794 toneladas respectivamente.

Fuente: Agritotal.com