Para algunos puede ser considerado fuego amigo, para otros es el sano ejercicio del debate interno en pos de mejorar el desempeño.

Lo cierto es que las declaraciones e Amado Boudou lejos están de ser conciliadoras con el rumbo elegido por Martín Guzmán al frente de la cartera económica del Gobierno.

Y no solo le criticó no haber desarmado el paquete de Lelics sino que le atribuyó desconocimiento del funcionamiento de la economía real del país.