El Gobierno está gastando la parte del préstamo del FMI destinado a las reservas.  No tiene como fin palear el hambre (tenemos un 35% de pobres en el país y la mayoría son niños) ni a resolver el problema habitacional, ni a generar empleo.

Macri sigue intentando frenar el dólar. El Banco Central empezó a vender billetes que eran parte de los US$ 7.200 millones del acuerdo con el Fondo Monetario que no podían tocarse. 

Tampoco son boludos

El ministro Hernán Lacunza volvió de Washington, donde se reunió con los técnicos del FMI y tuvo el primer encuentro con Kristalina Georgieva, la nueva titular de la entidad multilateral.
 
El ex ministro de Vidal pretendía que el ente le desembolse US$ 5.400 millones pendientes, que en teoría deberían haber sido llegado en septiembre. Pero todo indica que no llegarán hasta que haya un nuevo Presidente electo.